La vida es la imposibilidad de lo que buscamos. De ahí que la vida se parezca tanto a los sueños. Hacer música en grupo tiene algo de imposible y algo de sueño, porque en la trastienda del sueño está la imposibilidad misma de dominar la música.
Hay un mundo entre lo que suena dentro de nuestras cabezas y la melodía que nos devuelve la vida. El misterio de un eco defectuoso. Cuando tocamos otras existencias, nuestros dedos son los médiums de ese misterio. Un misterio que recuerda el montaje defectuoso de una película, con las imágenes huyendo de las palabras, muertos que siguen hablando y diálogos sin voz.
En la música, para que labios y sonido se abracen, necesitamos de una presencia. Porque sin testigos la música se observa a sí misma, en silencio. El sonido, que es niebla, rodea a esa presencia, y sus ondas actúan como el médium de un sueño común. Un sueño real, imposiblemente real. Un sueño hecho de sonidos.
Sonidos y sueños. No es casualidad que suena y sueña tengan caligrafías vecinas. Las separa apenas una llamita tumbada: es el calor de una presencia.
El jueves 15 de mayo Midnite Special actúa en la sala Boîte de Madrid, presentando su EP Power Lines. Vuestra presencia es ese fuego necesario. Un eco que nos permita escucharnos, y alumbrar así un misterio compartido. Porque tan importante es tocar como escuchar. Abrazar como ser abrazado. Podéis comprar las entradas y conseguir información del evento en el siguiente enlace: http://www.bandeed.com/concierto/midnitespecialboitemayo14. ¡Os esperamos!